Globalización e idioma
Vivimos en un mundo regido por un orden internacional, donde la comunicación eficaz es vital y, para conseguirlo, la habilidad fundamental es el idioma.
Cuando hablamos, la gente generalmente logra comunicarse de forma eficaz, incluso aunque sus habilidades lingüísticas no sean perfectas, ya que la comunicación vis a vis, esto es, encontrarse frente a frente y mirarse a la cara, es flexible e interactiva. A medida que hablamos, corregimos nuestros errores repitiendo, preguntando y contestando. Hay algunas excepciones, en particular en política internacional, diplomacia, periodismo y en el sector jurídico, pero en general la comunicación verbal es bastante buena.
Traducción
de Documentos
La comunicación por escrito es muy diferente. Solo hay una manera de expresar lo que intentas decir y debe hacerse de una manera correcta. Los documentos se conservan, se copian, se leen y se releen. Hasta que llegan al destinatario final pueden pasar por muchas personas. En libros, películas, periódicos técnicos y científicos, eslogan publicitarios, un manual de instrucción, los pequeños errores e inconsistencias son escrutados, criticados y evaluados.
Cuando comparamos el título de un libro o una película traducido a varios idiomas, observamos que, con cierta frecuencia, la traducción se aleja de lo que quiso decir el autor en su idioma original. Entonces es cuando se pone de manifiesto el valor fundamental de un buen traductor.
Cuando un documento es traducido de una manera incorrecta, el lector lo percibe incluso aunque no conozca el idioma original. Esto produce una gran sensación de desconfianza e inseguridad en lo que estás leyendo. Incluso si estas traducciones están realizadas de una forma precisa te puedes cuestionar su exactitud. Por ello, hay un mercado cada vez más amplio de abogados, ejecutivos, profesores, interpretes, etc. que trabajan con los documentos originales, lo cual les permite evitar el riesgo que conlleva una traducción.
Por último, hay que pensar en el público al que va dirigido. El texto que has traducido puede terminar en el despacho de un director general de una empresa inglesa o americana, o en un equipo de ingenieros, un editor, un vice presidente de un banco. Personas que conocen su idioma de una forma tan fiel que incluso pueden saber a qué periódico pertenece un artículo, solo por la forma en que está escrito. Su idioma en el día a día, tanto en sus trabajos o cuando se relacionan fuera del ámbito laboral es el inglés. Dominan la lengua de Shakespeare, Chaucer, Burns. Este público exigirá una traducción de forma exacta y precisa, estos requisitos solo se los ofrecerá un inglés nativo, criado en Inglaterra y con una buena formación académica.
Cómo trabajamos
Realizamos un trabajo en común ya que consideramos que solo un nativo puede hacer una traducción de forma precisa. Ana González es nativa española y experta en lingüística. Con un amplio dominio del idioma inglés. Bill Dixon es nativo inglés británico, aporta una amplia experiencia técnica y financiera.
Por supuesto, nosotros usamos diccionarios y herramientas online, especialmente cuando necesitamos utilizar un lenguaje específico. Siempre trabajamos juntos, lo cual posibilita obtener tres aspectos que consideramos esenciales:
1- Ambos comprendemos a la perfección el documento original.
2-Que el documento traducido transmita con exactitud lo expresado en el documento original.
3- El resultado final tiene que ser una traducción completamente fiel al texto original, pero utilizando de forma natural las expresiones idiomáticas del idioma al que estás traducciendo.